El orégano es una hierba aromática que, seguramente, es importante en tu cocina. Ya sea para sazonar, tés, salsas o condimentar tus pizzas, es muy versátil. Tanto es así que sus características medicinales son muchas.
Científicamente llamada Oreganum vulgare, la planta ofrece muchas ventajas para la salud. Es rica en polifenoles, terpenos, pineno, borneol, linalol, terpieno y otros aceites esenciales. También tiene vitaminas A, C, K y B, minerales y complejos omega-3.
Beneficios del orégano
El orégano es ideal para dolores, para mejorar la digestión, para adelgazar e incluso para estimular tu sistema inmunológico. ¡Estate al tanto de todos sus beneficios!
1. Antibacteriano y fungicida
Investigaciones han mostrado que las especias son efectivas para combatir los agentes nocivos para el organismo. En grandes cantidades, es capaz de eliminar bacterias como Salmonella y E. coli.
El aceite de orégano se usa ampliamente en la medicina herbal como fungicida. Es bueno para prevenir esos hongos en las uñas de los pies, por ejemplo.
2. Regula la menstruación
El consumo regular de la especia o de su té puede prevenir los calambres menstruales y aliviar la tensión premenstrual (PMS). Algunos estudios incluso muestran que masticar la hierba fresca es un potente remedio natural para regular la menstruación y prevenir el sangrado excesivo.
3. Hace bien al corazón
Como todos los alimentos ricos en potasio y omega-3, esta hierba aromática no podría ser diferente. Ingerir la especia ayuda a prevenir enfermedades cardíacas. Puedes añadirla en pizzas, pastas, ensaladas, arroces y diversos alimentos.
4. Previene gripes y resfriados
El aceite de orégano también se puede emplear para prevenir infecciones de las vías respiratorias. Basta usar unas pocas gotas mezcladas con agua. Con esto es suficiente para garantizar el efecto.
El té también es bueno para esto y, asimismo, ayuda a contraer la gripe más rápido, aliviando los síntomas.
5. Mejora la digestión
La hierba actúa sobre la vesícula biliar, mejorando la digestión y todo el proceso de secreción de bilis. Las personas que comen orégano a menudo no tienen gases, dolor abdominal o dificultades para ir al baño.
Puedes tomar té de especias como digestivo después de comidas pesadas.
¿El orégano ayuda a perder peso?
La respuesta es ¡sí! El té, la hierba y el aceite de la planta son excelentes para aquellos que buscan reducir algunos kilos en la báscula. Esto se debe a que el orégano contiene carvacrol, un compuesto que previene la acumulación de grasa y reduce la inflamación en el tejido adiposo.
Estudios realizados en los Estados Unidos han demostrado que comer especias en los alimentos cotidianos puede prevenir la obesidad. Los otros compuestos de orégano reducen aún más el apetito.
¿Y quién no le gusta el orégano en absoluto? Sin embargo, comer la hierba no es suficiente para perder peso. ¡Recuerda que debes hacer ejercicio físico y llevar una dieta equilibrada y saludable!
Cuidados a tener en cuenta
Difícilmente una persona consumirá demasiado orégano porque el sabor es demasiado fuerte. Pero siempre vale la pena señalar que el consumo excesivo de condimentos puede causar alergias, problemas estomacales, vómitos y diarrea.
Aparte de eso, la planta es totalmente segura para el consumo. También recordando que no se le debe ofrecer a los bebés sin consentimiento de un médico.
Para qué sirve el té de orégano
El té de plantas sirve para aliviar los síntomas de la gripe y el síndrome premenstrual. Asimismo, contiene todos los beneficios ya citados y mencionados. Si no te gusta la especia en la comida, puedes optar por la infusión.
Ingredientes
- Orégano: 1 cucharada sopera;
- Agua: 1 taza.
Modo de preparación:
1. Hierve el agua y retira del fuego.
2. Pon las hierbas en el agua y tapa la olla. Dela que la infusión repose durante 5 minutos.
3. Cuela bien y bebe.
Para suavizar el sabor de la infusión, puedes agregar miel o stevia. También puedes hacer té con otras hierbas como la canela y el clavo de olor, por ejemplo.
Recuerda que los datos expuestos no remplazan a la opinión de un profesional. Por lo tanto, antes de introducir un alimento nuevo en tu dieta, consulta a un médico si es adecuado en tu caso.
