Corría el año 2009 y Lucy Hussey-Bergonzi había cumplido su mayor sueño, quedar en un casting para la famosa película Harry Potter. Lucy tenía 13 años y llevaba una vida totalmente normal.
Meses después de cumplir con su participación en la película, empezó a presentar dolores de cabeza muy fuertes hasta que se desvaneció totalmente, en ese momento la llevaron al hospital y allí descubrieron que había sufrido una grave hemorragia cerebral debido a una malformación congénita.
Lucy se encontraba en coma, estado en el que fue sometida a dos intervenciones quirúrgicas sin generar ningún tipo de resultado, pero la respuesta de los médicos era muy clara, Lucy no iba a sobrevivir.
Sus padres estaban totalmente devastados, perderían a su pequeña. Denise, la madre de Lucy sólo tenía un deseo para su hija, quería darle lo mejor para la próxima vida y sólo podrían hacer eso mediante el bautismo.
Llamaron a un sacerdote, quien sería el encargado de introducir a Lucy en la religión católica. Cuando culminó el sacramento ocurrió un milagro, Lucy empezó a mover el brazo luego de haber recibido el Agua Bendita.
Su madre pensó que era un impulso nervioso sin mayor importancia, pero 24 horas después Lucy se había recuperado muchísimo, los doctores se sorprendieron y no tenían ninguna explicación ante este hecho.
Actualmente Lucy recibe terapia de lenguaje y física para poco a poco recuperar los movimientos de su cuerpo en su totalidad, pero lo mejor de todo, ¡está viva!.
Al no tener ningún tipo de explicación ante lo sucedido, lo único que justifica la recuperación de Lucy fue el sacramento del Bautismo y la bendición de Dios, un verdadero milagro.
Hoy en día Lucy sólo sufre de algunos pequeños dolores de cabeza pero poco a poco ha podido incorporarse nuevamente a sus actividades cotidianas.
¡Dios todo lo puede!
Esta niña también tuvo una milagrosa recuperación tras sufrir de parálisis, sepa más sobre este sorprendente caso:
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