De acuerdo con el Dr. Drauzio Varella, la tendinitis es una inflamación que afecta a los tendones (estructuras fibrosas que unen los músculos a los huesos) y es parte del grupo de lesiones por esfuerzo repetitivo (RSI), junto con bursitis, epicondilitis, tenosinovitis y tantas otras. Esta ocurre, justamente por el esfuerzo de repetición muy común en atletas, músicos y personas que pasan el día escribiendo, haciendo otro trabajo manual y cargando peso. Mira cuáles son los síntomas y también los remedios para la tendinitis que ayudan a tratar la inflamación y aliviar los síntomas.
Síntomas de tendinitis
Como es una inflamación, los síntomas de la tendinitis son los clásicos de este tipo de problema, como el dolor incómodo y constante en el sitio inflamado, con hinchazón, enrojecimiento y dificultad para moverse.
Esta puede afectar, principalmente, a los hombros, pero también le sucede a las muñecas, las rodillas, los codos y los tobillos. Además del dolor en el tendón mismo, la incomodidad puede irradiarse a áreas cercanas, afectando a los músculos e incluso comprometiendo los movimientos, dependiendo de la gravedad.
Remedios para la tendinitis: caseros, terapias y de farmacia
Tan pronto como notes que este dolor no desaparece, la mejor opción es consultar al médico para asegurarte de qué es. Nunca se recomienda automedicarse, ya que puede tratarse el problema de manera incorrecta y acabar permitiendo que la tendinitis empeore, debido a la falta de un tratamiento adecuado.
Aun así, existen tratamientos caseros que se pueden aplicar hasta el día de la consulta o incluso con el tratamiento recomendado por el médico, si él lo permite. Conoce todas las alternativas principales en cuanto a remedios para la tendinitis.
1. Hielo y reposo
En casa, incluso antes de consultar al médico, es necesario mantener la zona del dolor en reposo tanto como sea posible, porque cuanto más la muevas, más se inflamará. Al mismo tiempo, puedes aplicar compresas frías para aliviar el dolor. Coloca un poco de hielo en una bolsa de plástico, envuélvelo en una toalla delgada para que no se pegue a la piel y déjalo entre 5 a 10 minutos. Haz descansos, y después repite la compresa.
2. Acupuntura
La acupuntura es una técnica de medicina oriental que se bastante utilizada en muchos países como un tratamiento complementario para diversos problemas de salud. Esta consiste en aplicar pequeñas agujas en puntos específicos de dolor mientras la persona está acostada en una camilla.
Son agujas muy pequeñas, por lo que solo sientes un leve pinchazo. Después de unos minutos de actuación, se quitan las agujas y la sesión está acabada. El médico determinará cuántas sesiones necesitarás y los demás cuidados que deberás tener durante el tratamiento.
3. Remedios antiinflamatorios
Si prefieres solo un tratamiento de medicina tradicional con fármacos, debes ir al médico para que te recete el mejor tipo de antiinflamatorio y que te diga por cuánto tiempo debes tomarlo, así como también te aconseje sobre las otras precauciones que debes llevar a cabo para que el tratamiento tenga efecto.
4. Fisioterapia
La fisioterapia se puede realizar a través de diversas técnicas orientadas por el fisioterapeuta. Se extienden desde estiramientos específicos hasta ejercicios en el agua para facilitar el movimiento y fortalecer los músculos de manera más eficiente, hasta tratamientos con electroestimulación, conforme sea necesario.
5. Alimentos antiinflamatorios
Para dar un buen impulso a los demás tratamientos, también es importante mantener una alimentación saludable con alimentos antiinflamatorios que estimulen el organismo a lidiar con la inflamación. Algunos de estos alimentos son el jengibre, el berro, el atún, las sardinas, el salmón, el cilantro, el romero y el hinojo, que se puede hacer en té, usar como compresa o como especia en las comidas.
Ten en cuenta que los datos expuestos en este artículo no remplazan a la consulta ni a la opinión de un profesional de la medicina.
