Cuando uno es pequeño y sus padres le imponen ciertos hábitos, restricciones o reglas, muchas veces no entiende el porqué de ellas. Es más, en ocasiones se enoja y/o se rebela ante dichas pautas. Sin embargo, una vez que crece y tiene sus propios hijos, abre los ojos y se da cuenta que sus progenitores no estaban tan equivocados como él pensaba otrora. No obstante, dado que la sociedad va evolucionando y cambiando, existen ciertas reglas que los padres seguían y que uno se ha olvidado de ellas, y estas eran o son muy valiosas.
Reglas que los padres seguían y que ya no se ponen en práctica
Si hay una cosa que da la experiencia es sabiduría. Como dice el refrán, “sabe más el diablo por viejo que por diablo”. Es por ello que cuando a uno le toca educar a sus hijos aprecia tanto las palabras y enseñanzas que sus progenitores le dieron, aunque en ese momento no las valoraba.
Por eso, es importante que recuerdes las reglas que los padres seguían y que en la actualidad están en desuso o que muchas personas ya ni se acuerdan. Las mismas son de gran utilidad y ayudarán mucho en el desarrollo de tus pequeños.
La importancia de administrar el dinero
Desde bien chicos, es fundamental que se les inculque la importancia que tiene saber cuidar el dinero y lo que cuesta ganarlo. Esto será de gran ayuda para que en un futuro sepan llevar su economía mucho mejor.
Si les das todo lo que piden, se convertirán en personas malcriadas y maleducadas, y no valorarán el esfuerzo que se debe hacer para conseguir las cosas.
Aprende de los errores
Debes demostrarle a tus hijos que errar es de humano. Es más, gracias a estos pueden mejorar en su vida. También es bueno que dejes que se equivoquen por sí mismos. No puedes estar encima de ellos todo el rato. Los niños son personas independientes, y deben aprender ciertas lecciones, las cuales tiene que experimentar en sus carnes.
Sé respetuosos y no exijas tanto
Cuando alguien desea algo, tiene muchas más probabilidades de conseguirlo si es respetuoso y agradable que si exige demasiado. Los chicos tienen que aprende a usar la cortesía y la gracia cuando quieren algo de sus papás. Asimismo, estar agradecidos por lo que le dan y aceptar que hay cosas que no pueden obtener.
Las rabietas no son una arma para conseguir aquello que les gustaría tener, y mucho menos con la familia.
Saca ventaja de tu educación
La educación es uno de los valores que hará que tu pequeño llegue lejos en su vida. Instrúyelos a que busquen aquello que les haga feliz, ya sea estudiar una determinada carrera o realizar un trabajo que sea vocacional.
Igualmente, tienes que enseñarles a que sean autónomos y hagan los deberes en casa, a que tengan un buen comportamiento en el colegio y a que sean responsables de sus actos.
Las acciones tienen consecuencias
Una de las reglas que los padres seguían era la de ser coherentes con lo que decían y hacer cumplir a raja tabla un castigo a los niños hasta el final.
Si estos se comportan mal y los pones en penitencia, haz que la cumpla. Si les levantas el castigo, además de no respetarte, volverán a hacer lo mismo de nuevo porque saben que sus actos no tendrán ninguna consecuencia para ellos.
Pasar tiempo en la familia
La hora de la cena era sagrada. Esta comida era la hora del día en que todos los miembros de la familia podían estar reunidos, pasar un tiempo juntos, convivir, hablar de sus cosas y afianzar lazos.
Al mismo tiempo, este momento era muy útil para enseñar ciertos hábitos saludables en cuanto a la alimentación y el comportamiento que se debía tener en la mesa mientras se come.
Las tareas del hogar son buenas para modelar el carácter
Además de dedicarle tiempo a los deberes de la escuela y al tiempo de ocio, los críos deben formar parte de la estructura de las tareas del hogar. Claro está que dependiendo de la edad que tengan, se les deben otorgar unas responsabilidades u otras.
Cuando los niños realizan las tareas domésticas, estos tienen más éxito en el futuro, según apuntan algunas investigaciones. Además, esto ayuda a que sean más responsables, a que tengan más consideración por el entorno en el que viven y por las personas con las que comparten su vida y a que sean más cuidadosos con su higiene.
Para finalizar, en el próximo vídeo se dan unas claves de por qué la crianza de antes era mejor.
