Rhonda Gessner compartió en su blog lo que le sucedió a su hermana después de consumir diariamente una sustancia presente en muchos alimentos light. La hermana de la bloguera casi muere después de ingerir este producto en exceso.
Rhonda relató que su hermana comenzó a sentir fuertes dolores en el estómago, que le impedían levantarse. Realizó diversos exámenes médicos, pero nunca fue posible descubrir cuál era el motivo real de tantos dolores. Rhonda recordó que hace algún tiempo había leído un artículo sobre el aspartamo y sus efectos colaterales. Le preguntó a su hermana si bebía refrescos light y efectivamente, sí lo hacía.
Finalmente, el motivo de los terribles dolores era el aspartamo. Los médicos llegaron a esa conclusión después de analizar el caso con más detalle. Fue descubierto lo que casi mató a la joven: envenenamiento por aspartamo.
¿Sabía que esta sustancia es 200 veces más dulce que el azúcar? Es este el motivo que lleva a que esté presente en muchos productos dietéticos y refrescos light, además de otros productos. El envenenamiento por aspartamo puede provocar los siguientes síntomas:
– Fatiga y taquicardia.
– Falta de visión o visión distorsionada.
– Dolor o inflamación abdominal y diarrea.
– Urticaria intensa;
– Dolores de cabeza, náuseas y desequilibrio.
–Depresión y agresividad.
En Europa, el nivel máximo de aspartamo que cada persona puede consumir diariamente es de 40 mg por cada kg de su peso, pero es recomendable evitar la ingesta de este producto o consumir la mitad de esta dosis (20 mg por kg de peso).
Después de dejar de ingerir esta sustancia, la joven mejoró pero necesitó tratamiento, porque el mal ya estaba hecho. Estos ingredientes artificiales están más presentes en nuestra rutina diaria de lo que imaginamos, pero perjudican nuestra salud.
Como explicamos en un inicio, este artículo está basado en el testimonio y estudios de Rhonda, pero no está avalado por otros estudios científicos.
Compartimos este video que nos explica qué efectos cusa en nuestro cuerpo el consumo de gaseosas:
Fuente: https://rhondagessner.wordpress.com/