Una X roja en la mano, dibujada con un bolígrafo, lápiz pintalabios. Es con este sencillo símbolo que las mujeres víctimas de violencia doméstica pueden pedir ayuda discretamente. Esta iniciativa forma parte del Programa de Cooperación y del Código Sinal Vermelho desarrollado en Brasil.
Si una mujer llega a una farmacia, tienda, mercado, condominio, hotel u otro establecimiento y muestra una X roja en la palma de su mano, los comerciantes sabrán lo que significa y llamarán a la policía sin hacer un escándalo.
Por desgracia, la mujer víctima de violencia doméstica sufre de silencio, ya que la mayoría de las veces corre el riesgo de muerte si el agresor se da cuenta de que está pidiendo ayuda. Por eso es tan importante que esta señal sea una forma discreta y sigilosa de pedir ayuda.
Cómo funciona
La idea es que toda esta práctica se vaya extendiendo a más territorio y pongan en práctica esta iniciativa puesta en marcha por las Secretarías de la Mujer, Seguridad Pública y Policías Especiales de la Mujer de Brasil. Cabe destacar que dichos organismos están asesorando a los comerciantes sobre cómo proceder cuando una mujer pide ayuda.
La mujer debe ser acogida en el lugar donde pidió ayuda. Luego, el contacto con la policía tiene que ser discreto y esperar a que llegue la ayuda. Es aún más importante mantener la discreción cuando una mujer va acompañada de un hombre, ya que puede ser el agresor y este no debe sospechar nada.
Un buen ejemplo de cómo actuar es la manera de proceder que tuvieron en un colegio cuando una mujer maltratada entregó una nota de socorro junto con los documentos de la matrícula de su hijo.
Si no es posible ayudar a la mujer en el momento, es importante anotar sus datos personales para transmitírselos a la policía al realizar la llamada.
El equipo policial debe llevar a la víctima a la comisaría para que esta ponga y, de ser necesario, llevarla a un centro médico para que reciba atención que precise o un centro de atención especializada.
Muchas veces la mujer ya no puede regresar a casa, por lo que necesita ser referida a un Centro de Atención Especializada a la Mujer, a la Secretaría de la Mujer o a un centro para tal fin para que tenga acceso a servicios de asistencia social, psicológica y orientación legal.
Cómo participar
En Brasil, los comercios e instituciones interesadas en sumarse a esta iniciativa deben comunicarse con la Secretaría de la Mujer de su ciudad para solicitar materiales de capacitación, así como un sello de identificación que se colocará en el establecimiento, en un lugar visible, permitiendo a la víctima saber dónde puede recibir ayuda.
Sin duda, una iniciativa muy buena que se debería extender a otros países. Es importante destacar que por causa del confinamiento muchas mujeres maltratadas tienen que pasar más horas que nunca con sus agresores y las posibilidades de pedir y/o recibir ayuda se han visto reducidas.
