Un perro triste, sentado bajo la lluvia, en la puerta de una tienda en Malasia. Esta fue la escena que vio un hombre mientras pasaba por la calle, y se conmovió.
Compadecido por el cachorro, que parecía estar perdido, sin rumbo en la vida, el TikToker JimJimmie decidió preguntar al dueño de la tienda si el animal era suyo, y así descubrió que no tenía dueño y que llevaba allí 4 días.
Así que decidió grabar un vídeo de lo perro triste, ofreciéndole algo de comida para poder acercarse y filmar mejor sus rasgos. Podría estar perdida y su familia queria encontrarla.
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TikToker ya sabía cómo intentar acercarse al triste cachorro porque suele dar de comer a los animales que encuentra por la calle. Con esto, por supuesto, tampoco pudo quedarse indiferente y decidió ayudarla.
Poco sabía que realmente estaba ayudando, mucho más allá de ofrecerle un poco de pienso. Tras grabar el vídeo de la perrita, lo colgó en sus redes sociales y todos sus seguidores empezaron a compartir para ayudar.
@jimjimmie Replying to @ciktarusma Kesetiaan yg tiada penghujung. kesian dia? #anjingjalanan ♬ Kiss the Rain – Elise Bechstein
Como el “milagro” de las comparticiones en Internet, el vídeo del triste cachorro llegó a una mujer llamada Vaani.
En cuanto vio el vídeo del cachorro, Vaani se puso inmediatamente en contacto con JimJimmie para decirle que el cachorro era suyo y que se llamaba Bairava. La historia empezó a desarrollarse a partir de ese momento, y TikToker se alegró de que su vídeo cumpliera su propósito.
Resulta que Bairava llevaba 8 meses desaparecida, tras ser separada de su familia mientras Vaani se recuperaba de una enfermedad.
Según Vaani, la perra estaba al cuidado de un amigo, que se olvidó de cerrar bien la verja.
Ese día era festivo y había petardos y fuegos artificiales en las calles, haciendo mucho ruido. Como les ocurre a muchos perros, Bairava se asustó y se escapó por la puerta entreabierta.
Desde ese día, en cuanto su amiga advirtió que la perra había desaparecido, Vaani y su familia buscaron a Bairava durante un mes, pero no pudieron encontrarla.
“Caminé por el barrio gritando su nombre durante un mes. Pero nunca la vi”, dijo en una entrevista que concedió después de que el caso adquiriera repercusión local.
Después de todos estos meses, cuando Vaani y su familia se reunieron por fin con Bairava, se echaron a llorar.
Dijo: “Me acerqué y la llamé por su nombre… todos llorábamos y abrazábamos (a nuestra perra)”.
El momento fue de gran alegría, ya que la cachorra gozaba de gran estima. Vaani la rescató cuando Bairava era un cachorro callejero, hace cinco años.
Tras el susto, la familia vuelve a reunirse, y la triste perrita solo tiene motivos para alegrarse.
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