Según los datos del Boletín Epidemiológico de Sífilis de 2018, publicado por el Ministerio de Salud de Brasil, los casos de sífilis en Brasil han aumentado. En comparación con 2016, hubo un incremento del 28.5% en mujeres embarazadas infectadas, así como un aumento del 16.4% en casos congénitos (nacimiento) y 31.8% en casos adquiridos a lo largo de la vida. Estos datos deben tomarse en serio como una advertencia sobre la falta de conocimiento sobre esta enfermedad. Por eso, conoce más sobre qué es la sífilis, su transmisión, síntomas por tipos y tratamientos.
¿Qué es?
La sífilis es un tipo de infección de transmisión sexual (ITS) causada por Treponema Pallidum, una bacteria muy peligrosa que puede provocar la muerte si no se trata y evoluciona en el organismo.
¿Cómo se trasmite?
Por lo general, a infección ocurre durante las relaciones sexuales sin un preservativo con una pareja infectada, incluso si aún no tiene ningún síntoma visible.
El contacto con las heridas del pene, la vagina, la vulva, el ano, el recto y la boca es la forma más común de contagio. Sí, el beso puede transmitir la enfermedad, si el portador tiene llagas internas o externas en la boca.
También existe el contagio de la madre al feto, a través de la placenta o durante el parto, que se llama sífilis congénita. Conoce, a continuación, cada tipo de sífilis.
Tipos de sífilis y sus síntomas

Son muchas fases y muchos síntomas presentados, lo que hace que el diagnóstico sea más delicado. La enfermedad se clasifica según su etapa de infección, mira, a seguir:
Congénita
Es el tipo en que la madre infectada transmite a su bebé dentro del útero que nacerá con la enfermedad.
Si la madre no recibe tratamiento durante el embarazo, el riesgo de contaminación es del 80%. La probabilidad de supervivencia del feto, si se trata, es del 60%. Las chances de secuelas son del 40%. Por eso, los exámenes son obligatorios.
Fase latente
Hay una fase en la que los síntomas aún no han aparecido, lo que hace que el paciente continúe infectando a otros sin darse cuenta. Esta fase es bastante variable, pudiendo demorar hasta un año para que aparezca la primera lesión. Es por eso que la visita anual al ginecólogo es tan importante. Entre las pruebas de rutina solicitadas, se encuentran el VDRL y el FTA-Abs, específicos para detectarlo.
Primaria
En este tipo, la primera lesión ocurre aproximadamente de tres a cuatro días después del contagio. Esta lesión es una bola pequeña (el cáncer duro) que comienza a convertirse en una herida más profunda, pero no duele. Tiene una textura endurecida y excreta un líquido transparente. Ocurre en la región genital y, a veces, en el interior, se vuelve imperceptible.
Las heridas desaparecen en unos 10 días, incluso si no se tratan. Entonces la bacteria estará “adormecida” en el organismo. Si no se trata, incluso si parece haber desaparecido, la enfermedad progresará a la siguiente etapa. Debes saber que solo 1 de cada 3 infectados tiene la lesión visible.
Secundaria
La bacteria se propaga por todo el organismo, causando síntomas generales, como malestar general, somnolencia, cansancio, fiebre, falta de apetito, náuseas, dolores de cabeza, pérdida de cabello y manchas rojas en las palmas y las plantas de los pies que no pican ni duelen.
Es preciso estar atento porque son varios los síntomas que pueden aparecer en este tipo, inclusive dolor muscular, pérdida de cabello y cejas, cambios intestinales, hepáticos, renales e incluso en el sistema nervioso central.
Generalmente, estos síntomas desaparecen después de dos semanas, más o menos, incluso sin tratamiento. La bacteria está inactiva en el organismo de nuevo, pero continúa siendo transmisible.
Terciario
En esta fase, la enfermedad ya no es contagiosa, pero es crónica. El gran peligro es que la bacteria ataque los grandes vasos del cuerpo, lo que conduce a enfermedades graves. Aproximadamente 3 años después de la infección, el portador puede presentar:
- Problemas cardíacos;
- Problemas neurológicos;
- Problemas vasculares;
- Heridas por toda la piel;
- Dolores en los huesos y articulaciones;
- Meningitis;
- Parálisis;
- Problemas oculares;
- Problemas en el cerebro;
- Demencia.
Tratamiento
A pesar de ser difícil afirmar el diagnóstico solo por los síntomas, la confirmación a través de análisis de sangre es rápida y está disponible en el Sistema Único de Salud (SUS). Es obligatorio para mujeres embarazadas y extremadamente recomendado para personas con una vida sexual activa.
Cuando se descubre y se trata temprano, la sífilis tiene una tasa de curación del 95% de los pacientes.
Prevención

Entonces, después de saber qué es la sífilis y qué puede hacer esta bacteria en tu cuerpo, no hay nada mejor que tener cuidado para prevenirla.
En las relaciones sexuales, nada de ceder o dejarlo pasar una vez. ¡Usa siempre el preservativo, masculino o femenino!
Si sospechas de cualquier lesión, busca atención médica de inmediato. Es mejor pecar por exceso de cuidados que sufrir las consecuencias más tarde.
Las mujeres embarazadas deben, independientemente del caso, realizar atención prenatal, en la que se tomará toda la atención para la madre y el bebé, incluidas las serologías como esta.
Recuerda que la prevención es siempre la mejor manera de cuidar tu salud, en general.

