Existen algunas enfermedades que generan consecuencias irreales y este fue el caso de 30 presos en Roraima que tuvieron que ser hospitalizados por una enfermedad infecciosa. Esta dolencia ocasiona varias heridas y corroe la piel del paciente que la tiene, causando un sufrimiento extremo. Descubre cómo sucedió en la cárcel más grande del estado y qué medidas se tomarán.
¿Cómo empezó el brote?
No es sorprendente que este brote haya llamado la atención de las autoridades. Una enfermedad muy rara afectó a un contingente de 30 personas que vivían en el mismo lugar. Ante esto, surge una pregunta: ¿cómo surgió el brote?
Ante lo ocurrido, el Ministerio Público de Roraima solicitó que se prohibiera la Penitenciaría Agrícola de Monte Cristo. Al fin y al cabo, esta no cumplía con las condiciones mínimas para proteger a un ser humano, mucho menos para volver a socializarlo en la sociedad.
Qué es lo que se va a hacer
Con el fin de corregir los efectos causados por el error de planificación y la negligencia de las condiciones de vida dentro de la cárcel, fueron tomadas algunas medidas.
Atención por demanda
Disponibilidad de medicamentos
Los antibióticos estarán disponibles en caso de emergencia para la atención de estos pacientes. Para eso, contarán con el apoyo del Sistema Único de Salud (SUS), llevando los medicamentos a los pacientes. Asimismo, se tomarán nuevas medidas para recolectar materiales para su examen.
Provisión de un ala del hospital
Debido a la urgencia de la situación, se puso a disposición un ala del Hospital General de Roraima (HGR) para atender a todos los pacientes infectados en prisión. Acompañado por esto, se reforzó el marco de escolta e inspección para evitar el vuelo en masa y otros problemas relacionados con el crimen.
Higiene de las celdas
Para mejorar el cuadro de limpieza de la prisión, se realizó un control de plagas en todo el edificio. Además de eso, hubo una desinfección específica de cada celda, y los internos más serios fueron remitidos para un examen médico. Esta inspección y limpieza fue esencial para evitar la propagación de la bacteria entre presos que estaban saludables.
Permiso para recibir kits de higiene
Después de que ocurriera este gran problema relacionado con una enfermedad rara, otra medida tomada fue la autorización para que los prisioneros recibieran kits de higiene. Por lo tanto, la familia podría contribuir directamente a revertir esta situación.
Un caso de descuido, falta de respeto y falta de humanidad con las personas que están encarceladas y no pueden cuidarse adecuadamente. No es porque hayan cometido algún delito que simplemente deberían ser eliminados. La idea es que la prisión ayude a insertar al prisionero en el mercado laboral, con dignidad y salud.

