Amanda Hendricks, procedente de Sidney Australia, estaba a punto de vivir el momento más feliz de su vida junto a su marido Ryan, ¡Por fin serían padres!, luego de casi 4 años de búsqueda habían logrado finalmente cumplir el sueño de tener un bebé.
Llevaban años preparándose para recibir al pequeño, por lo que se compraron su primera casa con la idea de brindarle un mejor hogar. Se comprometieron con el banco a pagar una hipoteca.
Tristemente, de forma totalmente inesperada, a dos meses de dar a luz, Ryan simplemente desapareció, dejando a Amanda sola con su bebé, con las deudas y todas las responsabilidades económicas.
Amanda estaba impactada, jamás pensó que el hombre del que estaba enamorada la abandonaría de esa forma. Estaba totalmente sola, no tenía a nadie y realmente estaba enfrentando una situación muy difícil.
Su amiga Hanna estaba muy preocupada por la situación de Amanda, pero no contaba con los recursos económicos suficientes para ayudarla. En este momento Amanda se estaba debatiendo entre dejar su casa, lugar en el que soñaba criar a su bebé o no tener dinero suficiente para mantener a su pequeño hijo.
Ya en la semana 36 Amanda no sabía qué hacer, seguía muy preocupada y deprimida, situación que afectaba su salud. Hasta que su amiga Hanna tuvo una gran idea, contar su historia en un famoso programa radial de la ciudad.
El programa decidió llamar a Amanda para entrevistarla, ella jamás imaginó la sorpresa que recibiría del equipo de producción.
Mientras contaba a todos su historia, de forma inesperada se encendió el televisor que tenía frente a ella, cuando se percató de lo que mostraban las imágenes se dio cuenta que se trataba de su casa.
La emoción empezó a correr por su cuerpo, definitivamente sabía que algo bueno iba a suceder, pero no sabía qué.
La primera imagen que se mostró fue la de una aspiradora, el equipo le indicó a Amanda que contaría con una persona que la ayudaría a limpiar su casa durante un año de forma totalmente gratuita.
Al acercar la cámara al refrigerador y abrirlo, las imágenes mostraron de inmediato decenas de paquetes de comida de Eat Fit, “Ellos le suministrarán toda la comida que necesite durante 6 meses”, indicó el presentador.
Pero eso no era todo, tenía además en su habitación casi 3 mil dólares en artículos para bebé, incluyendo todos lo necesario para el pequeño, además de un cupón fotográfico con un valor de mil dolares.
Finalmente le mostraron el regalo mayor, casi 8 mil dólares en efectivo, al lado de una nota que decía: “Para que pagues parte de tu hipoteca, no estás sola”.
Amanda no podía creer lo que estaba sucediendo, no podía contener las lágrimas de felicidad y agradecimiento. Pensaba que estaba soñando. “No tengo palabras para agradecerles todo lo que hicieron por mí, de verdad, no saben lo mucho que significa esto para mí y mi pequeño hijo”, afirmó Amanda al programa de radio.
Le invitamos a ver la conmovedora reacción de Amanda:
Lamentamos profundamente que existan personas cómo Ryan, pero agradecemos de todo corazón que todavía existan personas buenas en el mundo. Definitivamente, los productores del programa radial cambiaron la vida de Amanda y devolvieron la sonrisa a su rostro.
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