Incluso con tanto cuidado y atención, algunas situaciones están fuera del control de los padres en el cuidado de sus hijos, como las cosas que suceden cuando están en el colegio.
Antes de la pandemia, ya existían algunos casos de abuelos que iban a recoger a sus nietos a la escuela y acababan llevándose al niño equivocado. Pero, ahora en la pandemia, el problema ha aumentado debido al uso de las mascarillas.
“Fue extraño, no le había pedido a nadie que recogiera a mi hija. Cuando presioné a la maestra, la empleada confesó que Lola se mostraba reacia a irse, pero asumió que estaba triste porque no era su madre la que la había ido a recoger”, dijo Jessie.
Como es de imaginar, la madre se desesperó y corrió al colegio, para saber si había pasado algo. Incluso sin querer, Jessie empezó a pensar que a su hija la habían secuestrado.
Pero, al final, tan solo se trató de un error y a Lola la llevaron de nuevo a la escuela tan pronto como el otro abuelo notó la confusión que él y la maestra habían hecho.
Una vez pasó el gran susto, Jessie decidió contar esta historia en Instagram para advertir a otros padres, abuelos y profesores.
“Enséñale a tus hijos que no hay problema en pedir ver los rostros de los adultos, si no están seguros que es alguien que conocen, y explícales que sus mayores pueden cometer errores. Necesitan saber hablar y usar su voz si creen que algo no está bien”.

