¿Qué son los hábitos de pobreza? Esto es lo primero que hay que aclarar para evitar este tipo de comportamientos, los cuales afectan negativamente a los pequeños. En sí, son actitudes o palabras que se repiten de una manera continua, y que de alguna forma, hacen que te mantengas en carencia o desventaja frente a los otros. Con el fin de seguir transmitiendo este comportamiento a loas nuevas generaciones, es bueno que conozcas unos hábitos de pobreza que les enseñas a tus hijos inconscientemente.
Hábitos de pobreza que les enseñas a tus hijos inconscientemente
Los hábitos de pobreza que les enseñas a tus hijos inconscientemente, aparte de en el núcleo familiar, estos los puedes adquirir en sitios como el colegio, la iglesia. Para que sea más fácil de entender a qué hacen referencia estos comportamientos, un ejemplo sería decir: “Eso es solo para ricos”, “Soy pobre, peor honrado”, “Las personas con dinero son gente mala y mafiosa”.
Se podría decir que, de alguna manera, estos hábitos de pobreza son patrones, paradigmas o prejuicios que están establecidos, incluso en la sociedad en sí.
Aunque no se haga con mala intención, este tipo de comportamientos pueden afectar negativamente al desarrollo del pequeño y en la manera en que se relacione en un futuro. Eso por no hablar de que, si llega a ser padre, hará lo mismo con sus descendientes.
Por lo tanto, presta atención a la siguiente lista, y evita por todo los medios volver a caer en estos fallos.
Horas que miran la televisión
La gente con bajos recursos económico pasa más de cuatro horas al día en frente de la televisión. En contraposición, los ricos a penas están media hora, si llega.
Los programas que ven los pobres
Dentro del tiempo que pasan viendo la televisión los pobres, como mínimo destinan dos horas a asistir reality shows y programas que son intrascendentes.
Los pobres no ahorran
Las personas con menos ingresos no ahorran. En el caso de que lo hagan, a penas destinan un 10%. Por su parte, los adinerados aplican la regla de 80/20
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No dedican tiempo al aprendizaje
Entre la población pobre, tan solo el 16% dedica parte de su tiempo a aprender cosas nuevas. En lo que respecta a los pudientes, estos nunca dejan de culturizarse y aprender cosas nuevas.
Sueñan con ganar la lotería
Otro de los hábitos de pobreza que les enseñas a tus hijos inconscientemente es el hecho de esperanzarlos con que algún día van a ganar la lotería o algún tipo de juego de azar. Los ricos, por su parte, saben que para obtener rendimientos hay que trabajar duro y después invertir.
Siempre se sienten víctimas
Ante cualquier circunstancia, la gente que no tiene muchos posibles se siente siempre víctima. Por ejemplo, el estado no paga lo suficiente o no recibo la ayuda de mis allegados. Al contrario, los pudientes elaboran su propio destino y saben que son los únicos responsables de sus actos y de su situación financiera.
No tienen un presupuesto mensual
Los ricos tienen consciencia de sus finanzas, de aquel dinero que entra en su cuenta cada mes y el que sale. En cambio, los pobres no cuentan con un presupuesto mensual, no tienen conocimiento de los activos, ni mucho menos cómo hacer para generarlos.
Se conforman con un empleo seguro
La gente que consigue tener mucho dinero es porque abre empresas, invierte y vive de sus activos. Al contrario, los pobres a penas se conforman con tener un empleo fijo y un sueldo seguro a final de mes.
No tienen metas
La falta de metas, objetivos y no tener visión de lograr nada en la vida es un hábito de pobreza. Esto no ocurre con las personas con dinero dado que trazan los propósitos que quieren conseguir, y una vez que los cumplen, se ponen otros aún más elevados.
Para finalizar, en el próximo vídeo puedes descubrir más hábitos que te mantienen pobre.
