Una historia reciente ha llamado mucho la atención dentro del mundo de la medicina. Una mujer de 61 años mostró algunos signos de demencia causada por una deficiencia severa de vitamina B12. Conoce cómo los médicos llegaron a esta conclusión.
Entiende qué pasó
Cinco años después de recibir el diagnóstico de una demencia, la condición de la mujer de 61 años fue reevaluada y el resultado mostró una gran diferencia con respecto a su diagnóstico anterior. Sus médicos han encontrado una deficiencia de una vitamina muy importante para el cuerpo humano.
La demencia, de hecho, fue un efecto secundario de una anemia perniciosa. Básicamente, esto hace imposible que el organismo produzca glóbulos rojos normalmente. Todo esto fue causado por la deficiencia de vitamina B12 en la dieta del paciente. Esta vitamina se encuentra fácilmente en el pescado, la carne, los lácteos y los huevos.
Todo sucedió después de una pérdida de conciencia seguida de una convulsión cuando la mujer fue llevada al hospital. Por lo tanto, después de exámenes específicos, los resultados mostraron que no tenía signos anormales ni cuadros de epilepsia. Entonces fue enviada a casa.
Aún así, ella continuaba presentando comportamientos extraños. Ella gritaba y hablaba sobre las visiones de los espíritus de los parientes muertos y que ellos le indicaban que no debía tomar su medicación. Ella todavía dijo que su familia estaba tratando de envenenarla para que no comiera junto a ellos.
Según su familia, la mujer comenzó a tener dificultades con su memoria y se distraía muy fácilmente. Debido a esto, le impidieron salir de la casa, ya que no podía volver sola.
Fue entonces cuando en el departamento de psiquiatría de la Nueva Escuela de Medicina de Lisboa, los médicos descubrieron que la mujer tenía una deficiencia de vitamina B12. Como resultado de este grave déficit, los médicos creen que la capa de grasa alrededor de la médula espinal de la mujer ha desaparecido. Esto causó a la mujer una degeneración de la columna y también le trajo los síntomas psicóticos que tenía.
Después del tratamiento indicado por los especialistas, ya no tenía los síntomas que había estado experimentando. Por lo tanto, según ellos: “la paciente tuvo una notable recuperación neuropsiquiátrica después del reemplazo de vitaminas y el manejo psicofarmacológico”.
Sin más signos de comportamiento agresivo y psicosis, la familia recuerda que el familiar “se volvió orientado al tiempo y al espacio, su discurso se volvió coherente y lógico, y su estado funcional volvió a lo que consideramos normal. Ahora puede cocinar, ayudar en la casa, comprar y ser totalmente independiente en las actividades diarias”.
