Es posible que ya estés acostumbrado a usar ajo y jengibre en tus comidas como especia o como aperitivo. Pero lo que aún no sabes es una noticia maravillosa que conocerás en este artículo.
El ajo y el jengibre son los alimentos más fáciles de cultivar en tu propia casa. Por lo tanto, nunca más tendrás que gastar dinero en supermercados ni preocuparte de que de repente no tengas uno para cocinar.
Por eso, aquí se enseña cómo plantar y cosechar tus propios ingredientes.
¿Cómo puedes cultivar tu propio jengibre?
Cuando las personas hablan de jengibre, estas piensan que es una raíz, pero en realidad es un error. El jengibre es un tallo subterráneo que solo expande sus raíces fuera del suelo en el momento de la cosecha.
Por eso es tan fácil cultivar jengibre: cada parte de su raíz da lugar a una nueva planta de jengibre. Mas para iniciar este ciclo es esencial tener una raíz que tengas un tallo anexado a esta. Entonces, cuando compres un jengibre para plantar, busca uno que esté cerca de brotar.
Se puede tratar de una planta tropical, al jengibre le encantan las temperaturas cálidas y los ambientes húmedos. Después de plantar el jengibre, asegúrate de que la raíz esté apuntando hacia arriba, porque allí es donde necesita crecer.
Las cocinas y los baños son ambientes perfectos para el crecimiento del jengibre, a pesar de ello parece extraño. Después de 10 meses de siembra, el jengibre debería estar listo para ser cosechado. Recuerda siempre guardar algunas raíces para replantarlas.
¿Cómo puedes cultivar tu propio ajo?
A pesar de que el ajo no tiene sus propias raíces, es muy fácil plantarlo y cosecharlo en casa, porque, en lugar de preocuparte por plantar y la cosecha, lo único que tienes que hacer es esperar.
En los supermercados, siempre que los dientes de ajo comienzan a brotar, estos se retiran para que el ajo vendido se vea más fresco. Pero se irá paso a paso para que no te equivoques en nada.
Cuando estés plantando el ajo, asegúrate de elegir el diente que esté más cerca del brote. Coloca este ajo debajo de 3 dedos de tierra y cubre con cuidado. No utilices demasiada agua para regar esta tierra dado que si está humedad en exceso puede pudrir el ajo.
El mejor momento para plantar el ajo puede ser octubre, ya que las hojas de verano generalmente se vuelven amarillas y este es el momento perfecto para la cosecha. ¡Tras unos 4 meses, ya podrás estar recogiendo tu cosecha de ajo!
Ahora ya tienes tu fuente infinita de estos dos alimentos extremadamente nutritivos.
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